La vuelta de Belén Esteban.

Dobló a sus rivales en su regreso. Por la puerta grande entró la de San Blas en su "Sálvame Deluxe", cosechando para el programa 2,7 millones de espectadores y un 20,2%, el segundo mejor resultado de 2.012. "Tenía adicciones, pero ahora estoy recuperada" fue el gran titular de la noche.
Con 15 kilos más en el cuerpo, con una terapia "superada" y 30.000 euros en el bolsillo retornaba "la princesa del pueblo" a su programa. Y el show estaba asegurado. El golpe de efecto lo dio cuando reveló un parte toxicológico negativo. Para tapar los rumores que le achacan una dependencia a la cocaína.
En la entrevista además desveló que cuando se marchó del programa estaba pasando por una grave depresión, que lloraba todos los días, que su pareja guadianesca Fran es un mentiroso y que tenía miedo a ser un juguete roto. Aun con esas se quedó a 600.000 espectadores y 5 puntos de igualar su marca del polígrafo del año pasado -en share llegó al 26,5% con una de sus rupturas con Fran, al 26,0% con su operación anterior y al 23,5% cuando el Defensor del menor de la Comunidad de Madrid le pidió al Fiscal que investigara su caso-.
Al final como dice Jorge Javier, esta chica cuenta siempre lo mismo, pero algo tiene que engancha. La gente media la ve como una chica de barrio, en plan Cenicienta que las ha pasado putas para sacar adelante a su hija. Y eso que no ha dado un palo en su puta vida, pero a la gente eso le da igual.
Y la tía consigue que la gente se alegre cuando le van bien las cosas y que se emocione cuando las pasa canutas. Es una petarda más del colorín, pero en un genero donde los montajes y las mentiras están a la orden del día ella tiene un alto grado de credibilidad. O sea que ella dice algo y como se le ve de lejos que no tiene ni media neurona, pues se la tragan. O que esté orgullosa de ser una analfabeta. Pues las marujas y no marujas dicen "si este tía que es más fea que yo, más tonta que yo, más inculta que yo y le van bien las cosas y es una estrella y encima tiene pasta, pues yo también puedo ser como ella".
Error amigas y amigos. Es muy difícil interesar a la gente años y años. Y encima contando desde finales de los 90 las mismas historias. Que si el Jesulín la echo de su finca, etc. Además como en todos los sitios, se necesita un padrino o una madrina, que es lo que ha tenido ella.
Ana Rosa Quintana vio en ella un potencial para su "Sabor a ti", pero no solo para que contara sus mierdas, sino para que opinara sobre realitys y demás porquerías de la telebasura.
Pero ya AR en 'Telecinco' vio que su carrera se había estancado y que si daba un paso más podría volverse tan millonaria como su madrina. Y ahí apareció el típico "buscafortunas" de representante y la mandó a los leones. Ni más ni menos que a "Sálvame", donde primero todos le reían las gracias para que subiera la audiencia y cuando dejó de romper audímetros la atacaron sin miramientos. O sea que se quedó sin sus privilegios de star hollywoodiense. Y ahí Belén se pillo un mosqueo de mil pares de narices Y hasta ahora.
Porque esta señorita no es capaz de darse cuenta que la están explotando, que podría vivir perfectamente y más tranquila dando tres o cuatro exclusivas al año en las revistas del colorín y dejar este mundo cruel.
Pero la pasta es la pasta y como entre que no discierne y que está rodeada de vampiros, pues no parará hasta que 'Telecinco' emita en directo su muerte y funeral. Ahí si que romperá audímetros.