"Yo nunca he cobrado un duro del PP", exclamaba indignada Isabel Durán, al respecto de las erróneas informaciones de la cuenta del Twitter del colectivo Los Genoveses-colaboradores de El Plural y afines al PSOE desde hace más de una década-, que sugerían que esta se había llevado 24.000 euros de la red gurteliana-hay una Isabel Durán que si lo hizo, pero no es ella-.
E Isabel tiene razón en pedir explicaciones porque es verdad que ella no se ha llevado un duro del PP. ¿O sí?
Para conocer a esta musa del PP y a esta manipuladora hay que conocer su vida; entra recién acabada la carrera a trabajar en el Europarlamento de Bruselas gracias a un político del PP-"yo no tengo padrino" dice ella que le dijo para que este la fichara-. Después empieza a ser conocida en el círculo periodístico madrileño de los noventa gracias a su relación con el sabueso de la información José Diaz Herrera-con el cual firma varios best seller de investigación-. Extrañaba a muchos que aquella guapetona veinteañera se convirtiese en la segunda mujer del periodista canario que rondaba los cuarenta y cinco años por entonces. Gracias a su marido se hace un hueco en la profesión-a ella que le gusta de ir de independiente- y este la enchufa en la redacción de Tiempo, donde Herrera había elaborado algunos de sus mejores reportajes de investigación.
Pero donde se confirma como la nueva musa del PP en tertulias y programas es en la etapa de poder de Zapatero. Gracias a sus amigos del PP Isabel se incorpora como tertuliana a varios programas de Telemadrid y encima tiene la desfachatez de fichar a la vez por Canal 9-de Valencia- y 7RM-de Murcia-, para presentar tertulias semanales. Pero sin tener ni zorra idea de la política valenciana o murciana. Eran tertulias para calentar el clima político nacional en las teles autonómicas del PP, de donde surgieron estas tertulias de política nacional. Como una especie de red de tertulias y propagandistas donde destacaba esta señora. Y con el dinero de todos.
O sea que Isabel banderas periodísiticas puede enarbolar pocas por decencia, si no quiere caer en un acto de cinismo. Una señora que ha "moderado" un supuesto debate en una televisión pública-acompañado de MAR o Alfonso Rojo-, pero no para denunciar las tropelías y corruptelas de Camps. Era para machacar a ZP. Ese programa se mantuvo varias temporadas-ahora con el PP en el poder a las autonómicas les ha dejado de interesar la política nacional- y hubo curiosas anécdotas como cuando Camps invitó a almorzar a la Generalitat a los integrantes de esta tertulia asquerosa-que encabezaba esta señora-.
En los estudios de el Canal 9 a Durán-con contrato blindado en la autonómica-, le permitían emitir para Radio Intereconomía el programa La Espuela. Gratis total para Ariza por supuesto.
Durán admitió en El gran debate que meses antes que Canal 9 la fichase de presentadora, el propio Camps la había agradecido en una llamada personal una defensa de este en La Noria-en este programa también Isabel le preparó una encerrona a Revilla, un día después de cenar con el actual presidente cántabro del PP Ignacio de Diego-. Defendiendo a corruptos se sube alto-esta comisaria política del PP de la única independencia que puede hablar es de la de Catalunya-
Los Genoveses ya han pedido perdón. ¿Cuándo pedirá perdón Isabel a los madrileños, murcianos y valencianos por manipular sus televisiones públicas a costa de forrarse?
Esta buena señora, como tantos otros, han vivido dd depredar lo público para ser corifeos "peperos". Sin bagaje intelectual (esta señora, en conversaciones de pasillo, es de una pobreza cultural que tira para atrás), ni profesional, se dieron cuenta muy pronto de que, si no vales para nada, arrímate a los que pueden dejarte "caer" algo. No es la única. Otros se han hecho millonarios viviendo de ser "víctimas oficiales" de ETA. Unos y otros, el caso es chupar de lo público.
ResponderEliminarEsta señora ha hecho doscientos programas con el "argumentario popular" por guión, el mismo que reciben cada día a las ocho de la mañana todos los cargos peperos y sus "periodistas" mercenarios de a tanto la calumnia.
Eso sí, estos que hoy son peperos, si la teta se secara no dudarían en dar un espectacular giro al otro lado, como ya ha ocurrido en numerosos casos, por ejemplo, el patético e hijo de nazi Herman Ters.