"Pepiño" Blanco absuelto y la caverna mira para otro lado

El ex-número dos del PSOE en la etapa de Zapatero, José Blanco, ha sido absuelto por la Sala Penal del Supremo de las acusaciones de tráfico de influencias. Se ha estimado el recurso del político gallego y la causa ha sido archivada.

La acusación se refería a la mediación de Blanco para acercar posturas entre el empresario gallego propietario de Azkar y un alcalde socialista catalán.

La caverna mediática que aprovechó esta situación para instrumentalizarla políticamente en el inicio de la campaña de las últimas Generales calla ahora. Las portadas que inundaron esos medios con esta acusación, ahora miran para otro lado tras la absolución de Blanco.

Hay algunas voces que incluso relacionan esta causa archivada con las buenas relaciones de Blanco con el PP. Hay mucha gente que solo cree en la justicia cuando le da la razón a sus intereses.

Dentro de la izquierda se ha olvidado la imprescindible labor de Blanco en sus años de Secretario de Organización del PSOE, cuando armó un partido desecho y consiguió colocar a candidatos de primer nivel en las diferentes autonomías, que dieron importantes triunfos para el PSOE.
Viendo hoy a gentes como Óscar López se echa de menos una figura que sepa aunar a todo el socialismo español bajo un proyecto común, como hizo Blanco.


Blanco también bordó una buena labor al frente del Ministerio de Fomento, e incluso acercó posturas con gentes tan lejanas en lo ideológico como Esperanza Aguirre.

Solo El Mundo saca su imagen en portada, para titular con sorna; "Las gestiones de Blanco en pro de su amigo no son delito". Él mismo ha admitido este mismo viernes en directo en El programa de Ana Rosa que intentó acercar posturas entre empresario y Alcalde.
No podemos convertir en delito el día a día rutinario. Si llevásemos a juicio a todos los políticos que levantan un teléfono para concertar una cita estarían las cárceles llenas. Si en esa gestión no hay presión hacia el Alcalde o no se demuestra aprovechamiento de la gestión de Blanco debemos absolver socialmente a Blanco, como así ha ocurrido.