"Ya que me han silenciado al otro lado, aprovecho 'Jugones' para decir muchas gracias". Así ha comenzado Josep Pedrerol su programa de este jueves en laSexta, un día después de que Intereconomía rompiese el contrato que tiene con el presentador y no le dejase entrar a las instalaciones de la cadena.
Al contrario que ayer con los medios, esta tarde Pedrerol no se ha pronunciado duramente contra Intereconomía ni su presidente, Julio Ariza. "Cada uno maneja las cosas como puede y como su conciencia le permite", ha valorado.
El programa ha comenzado recordando los primeros segundos de Pedrerol en 'Punto pelota', con su sintonía, en la primera entrega del programa.
"No me gusta que los periodistas seamos protagonistas, pero la desaparición de 'Punto pelota' ha sido noticia en todos los periódicos". "Ayer llegaron casi 100.000 tuits para esta pandilla de locos" que hacía el programa. "Intereconomía nos debía seis meses. Seis meses sin cobrar" llevaban los trabajadores de 'Punto pelota'.
"No quiero hacer sangre, cada empresario gestiona su empresa como quiere y le deja su conciencia"
"Ayer Intereconomía nos prohibió la entrada a nuestro puesto de trabajo". "No quiero hacer sangre de nada", cada empresario gestiona su empresa como quiere, ha opinado Pedrerol pero ha matizado, "y como su conciencia le deja".
"Pronto estaremos juntos de nuevo por la noche"
Pedrerol ha querido agradecer al público su "fidelidad, gracias por seguir creyendo que esto tiene futuro". "Pronto estaremos juntos de nuevo por la noche", ha terminado su discurso, sin dar más detalles, para pasar a dar las noticias deportivas de este jueves.
Vía: Vertele
Pedrerol seguro que acabará cobrando el dinero que le deben. A la altura a la que se movía, eso se cobra. Se sabe mucho de lo que no conviene saber.
ResponderEliminarEso sí, sus hasta anteayer más de 400 compañeros lo van a tener un poco más jodido. No digo ya nada de los despedidos (depurados ideologicamente) en las purgas aricistas ni de los provedores, que van a cobrar cuando el PP sea de verdad un partido demócrata, o sea, cuando las ranas crien pelo.