Un año de mierda

Cerramos 2013 vislumbrando un panorama atroz; casi 4.500 periodistas menos ejerciendo su profesión y 73 medios que han cerrado solo en este año. A este 2013 se le puede calificar sin objeciones como un año de mierda en el mundo mediático. Con todos los medios en crisis y una agudizante precariedad laboral, el futuro no es nada prometedor.


En la televisión el duopolio es asfixiante y las víctimas se siguen sucediendo; Intereconomía TV está al borde del cierre-por la megalomanía de Ariza con sus impagos y la salida de Pedrerol-, Marca TV cerró en pleno verano-otra chapuza de Roures-, MTV preparando las maletas-con extraña cancelación de Gandía Shore incluida- y la Iglesia pidiendo limosna en modo de licencia a Rajoy para que 13 TV le siga haciendo la propaganda a la derecha más rancia.


Las autonómicas por su parte siguen desguazadas; Canal Nou cerró tras dos décadas de corrupción, amiguismos y manipulación bajo las tutelas de Zaplana y Camps. La autonómica murciana está en mínimos y ya tiene proyecto de relevo, Telemadrid sigue en caída libre y ya no le interesa al PP ni como órgano propagandístico, y TV3, eterno ejemplo de mesura informativa, está liderando la turba mediática que ayuda con propaganda a la suicida aventura nacionalista-Godó que es más listo ya ha echado el freno de mano cuando ha visto la colina por donde se iba a precipitar Mas-.

En las privadas intranquilidad en Telecinco, ya que el serio y blanco proyecto de Antena 3 tiene cariz de arrebatarle el liderazgo en un plazo corto. Mientras las series le sigan sin funcionar a Vasile, este seguirá apostando por el entretenimiento salvaje. Este año el universo Telecinco nos ha dejado escándalos varios; la guerra de piscinas, Belén Esteban reconociendo cual juguete roto que se drogaba antes de salir en televisión, el suicidio sexual de Mario Biondo, el vídeo porno que no vimos de Gaby de Campamento de verano, la foto de la felación de Pilar Rubio, la hipócrita expulsión de Argi de Gran Hermano por un comentario sobre ETA, Pipi Estrada rabo en mano en una fotografía de su móvil hackeado, Pedre borracho en Campamento... gritando "me follaré a vuestras mujeres", Rafa Mora condenado a cárcel por una agresión en un gimnasio, Jorge Javier Vázquez expulsando a empujones a Olvido Hormigos mientras la llama "cerda", Vasile bajándose los pantalones ante el Gobierno y cancelando El gran debate y Te vas a enterar...

Para Atresmedia ha sido un gran año; Antena 3 ha logrado pelearle el liderazgo a Telecinco con su estrategia familiar y la Sexta se ha consolidado como el gran canal informativo-se aprovecha de la muerte por "italianización" de Cuatro-.

RTVE por su parte ni está ni se le espera; La 1 se ha hundido definitivamente, Somoano se ha cargado la herencia plural de Llorente, hay series que las han dejado ir o están en el congelador-Amar en tiempos revueltos, Gran Reserva o La República- y RNE ha cogido un preocupante perfil bajo.

En la radio todo sigue a peor; las emisoras locales han sido liquidadas y la programación se ha mimetizado hasta la estupidez-por no hablar de las vulgares musicales, con nuevos productos prefabricados como Megastar-. ABC Punto Radio cerró, Luis del Olmo se retiró y Abellán se marchó a acordarse de la COPE desde su blog. Vocento con esta operación salvará un poco su preocupante situación económica. En las minoritarias la situación es insostenible; esRadio está al borde del KO tras el polémico adiós de César Vidal-con Enrique de Diego filtrando relaciones extramatrimoniales de Ayanta Barilli y Federico y el propio César atizando a Dieter y Somalo- y Radio Marca tiene el cartel de "se vende".

En los medios impresos la situación va a peor. En el caso de las revistas, estas son las que por ahora están pagando el pato. Los dinosaurios de la prensa siguen sobreviviendo gracias a las injerencias desde el poder, como es el caso de El País, que ha dejado en estos meses un hueco preocupante a la izquierda. Pedrojota ha seguido en su mundo; se ha pasado el año intentando el asalto a Moncloa con Bárcenas bajo el brazo y además ha importando un novedoso sistema de pago online para El Mundo. La Razón por su parte ha agudizado su línea propagandística del Gobierno, con Casals tapando los chanchullos de Bárcenas en las tinieblas, y Marhuenda haciendo de friki pimpampum en tertulias. El ABC le ha seguido su estela de para cuadrar cuentas a costa de publicidad institucional y otras mamadurrias, que en nuestro país por desgracia son más rentables que hacer buen periodismo.

La Mosca Mediática