El secretario general de Manos Limpias ha puesto en la picota a los servicios secretos españoles al denunciar que ellos estaban detrás del "pequeño Nicolás". Lo ha hecho en el programa de Intereconomía TV Punto de encuentro, que presenta Mabel Mínguez.
El sindicalista ha dicho que Nicolás tenía cercanía con Elvira Rodríguez, la presidenta de la CNMV, con la que según Miguel Bernad desayunaba muchos días. También ha dicho conocía a Nicolás, y que se sintió presionado por el joven "impostor" para que su sindicato retirase la denuncia contra García Revenga, la sombra de la Infanta Cristina en las últimas dos décadas. Es decir, que según Bernad, Nicolás era un hombre del CNI encargado de presionar a Manos Limpias para conseguir que éstos quitasen la denuncia contra la Infanta: "Está claro que todos están presionados para proteger a Cristina y faltábamos nosotros".
Para Bernad, Nicolás era "portador de mensajes insitucionales, ha desvelado que le enseñó una supuesta grabación de los Mossos de Esquadra donde Miguel hablaba por teléfono con su hermana y ha revelado que el muchacho consiguió que el CNI le pusiera protección durante veinte días frente a su casa y frente a la sede del sindicato.
"Detrás están los servicios del Estado, el CNI. Yo no creo que el chico haya engañado a nadie. El CNI recluta a gente joven y participaría en alguna misión. A mi no me extrañaría que fuera interlocutor de la Casa Real o de la vicepresidenta. Ahora quieren hacernos creer que es un loco"...
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