El Plural denuncia, como si fuese un caso de flagrante corrupción, que Juan Carlos Monedero facturó 425.000 euros en dos meses. ¿Y qué? Nada, ni una sola prueba, solo insinuaciones sobre que creen que no pagó IVA. Entonces, por qué El Plural se suma a la caverna contra Podemos. Pues por la dependencia de Ferraz que tienen.
El Plural, diario impulsado desde el PSOE, fue lanzado por Lavinia, donde figuran varios ex políticos del PSC, y entre los anunciantes se encuentran diputaciones, ayuntamientos y comunidades gobernadas por los socialistas. No hay más que ver su suplemento andaluz, donde solo hay propaganda de Susana Díaz, que está patrocinado por Cajasol.
La distancia entre El Plural y el PSOE no ha sido nunca la más sana. El diario digital de Enric Sopena tiene una objetividad similar a la de El Siglo de García Abad, y el disimulo no es lo suyo. Porque si no es incomprensible que se dediquen a fabricar propaganda-filtrada desde Ferraz, como se demostró en un correo de Carlos Hernández, entonces encargado de prensa de los socialistas- y a fichar como columnistas a políticos socialistas como Rafa Simancas, Antonio Miguel Carmona o Eduardo Sotillos.
Enric Sopena, su actual propietario, ha desarrollado su carrera en parte a cargos de TVE, RNE o COM Radio, empresas públicas controladas por el PSOE y el PSC, partido al que ayudó en su última campaña electoral presentando su acto central.
El Plural solo habla de lo malo que es el PP y lo malo que es Podemos, ya que en el diario no hay información deportiva, de sociedad, internacional, cultural, tal y como hacían los pasquines a inicios del siglo pasado. Quizás es por esto por lo que participen en la guerra sucia contra Podemos.
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