Gym Tony llegó tímido a Mediaset la pasada Navidad. El espacio de sketches era estrenado con poca confianza por parte del grupo italiano, que guardó durante seis meses el formato en un cajón porque no confiaba en él. De hecho, Mediaset utilizó Gym Tony como relevo temporal de Todo va bien, mientras en la recámara preparaba el dating-show Happy hour.
Pero la vida te da sorpresas y Gym Tony funcionó; evolución positiva, fidelidad, curva ascendente, público juvenil, audiencia cada vez más aceptable y target favorable. En resumen; Gym Tony estaba renovado, Cuatro apostaba por él como formato estrella e incluso Mediaset lo lanzaba en FDF, donde ha repetido su buen papel. Este verano el formato ha aprovechado las vacaciones de Motos y la decapitación temporal de Wyoming para crecer día a día, rozando en algunas jornadas el 9% de share-dato que no se veía en Cuatro en esa franja desde El hormiguero-.
Ahora Gym Tony prepara nueva temporada y para impulsar aun más el formato, el gimnasio tendrá cuatro nuevos "clientes"; Pablo Carbonell, Iñaki Miramón, David Fernández y Adam Jezierski.
¿Cómo es posible que un programa tan hortera, cutrre y casposo, como éste, tenga exito? ¡Ésta es la España profunda, cada vez más amplia!
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