Está claro que las élites siempre abren champán en las noches electorales; lo abrieron por su Suárez, que tenía que encarar la Transición desde arriba. Lo abrieron por Felipe, que debía modernizar el Estado. Lo abrieron por Aznar, que tenía que limpiar la cloaca felipista. Lo abrieron por Zapatero, que tenía que limpiar el franquismo aznarista. Y lo hicieron por Rajoy, que debía mejorar las cuentas de ZP. Total; que el pacto Canovas-Sagasta ha sido actualizada y los apellidos nobles siguen disfrutando de privilegios mientras las clases medias y bajas se desangran.
En este caso, con casi total seguridad, volverán a descorchar champán por Albert Rivera, el nuevo Suárez para la segunda transición. Con su victoria, la derecha se vería modernizada, la izquierda comprobaría ligeros avances sociales y el centro creería que Ciudadanos va a limpiar el corral, cosa que nunca hará.
El mejor aliado de Rivera, aparte de Losantos y Ramírez, divorciados de Rajoy desde que no se echó a un lado en 2008 y decapitados por éste, es el Sistema, ya que Ciudadanos no tiene enemigos mediáticos y ya saben que las generales se votan contra alguien y no a favor de algo. Nadie, ningún gran medio, denuncia la Operación Libertas, el caso Jordi Cañas, la opacidad del partido, sus vínculos con el Ibex. Y ya saben, Cebrián y Pedrojota votarán lo mismo el mes que viene. ¡Qué miedo!
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ResponderEliminarNO A LA CENSURA MARXISTA PODEMITA, LIBERTAD DE EXPRESION Y NO A LA REPRESION
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