La guerra civil que se vive estos días en el seno de 8 TV tiene como protagonistas a los directivos de Godó y Mediaset. Recuerden que el grupo italiano ha asumido la gestión del canal autonómico ante la incapacidad del conglomerado mediático catalán de convertir en rentable el citado medio.
El Conde de Godó dio vía libre a que Mediaset pasase a pilotar este canal, gestionado por los hombres de Paolo Vasile desde hace algunas semanas, pero algunos de los directivos de La Vanguardia, RAC 1 o 8 TV miran con recelo las consignas de los propietarios de Telecinco, que ha traído bajo el brazo una receta en la cual el aumento de cortes publicitarios es primordial.
Los directivos de Godó en 8 TV, dolidos en su ego por ser apartados de la gestión del canal tras ser incapaces de encauzarlo económicante, han celebrado con sorna y alegría las bajas audiencias y cancelación de Trencadís, ambicios y fallido proyecto por el cual se vislumbraba el desembarco de las tropas de Vasile en la señal de Godó, grupo que hasta ahora había apostado por productoras independientes nacidas al calor de los éxitos profesionales de Josep Cuní y Alfonso Arús, Broadcaster y Luna Rossa, todo lo contrario que las "productoras de confianza" en la órbita de Fuencarral.
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