Paolo Vasile desenfunda esta noche La Voz, efectivo talent-show con el que buscan mejorar la media del prime-time en el primer trimestre televisivo, el de mayor inversión publicitaria, que no ha arrancado todo lo bien que el italiano esperaba.
Y es que las galas de Gran Hermano se han atragantado con Jorge Javier Vázquez acuchillado por un Águila Roja al que todos daban por muerto. Ahora al de Badalona le espera Chicote, ya que los directivos de Atresmedia parecen por fin haber regresado de vacaciones tras oler la sangre del programa que ejerce de columna vertebral de la competencia durante el otoño.
Por eso regresa el espacio musical presentado por Jesús Vázquez, presentador que estará respaldado por un ramillete de coaches de lujo: Alejandro Sanz, Malú, Manu Carrasco y Melendi. El asturiano regresa cuatro años después al que fue su programa.
Entre medias Melendi ejerció de padrino del fallido Generación Rock de TVE, se abrió las venas ante Risto Mejide en Cuatro y protagonizó uno y mil escándalos personales que le salpicaron en su vida personal. El más famoso saltó a la luz en diciembre de 2014, poco antes de que La Voz confirmase que no contaba con él. Lo publicó El Mundo: "Melendi, investigado por jugar al poker en un casino clandestino". En el reportaje se hablaba de un incidente presuntamente relacionado con su afición: "Ya en septiembre sería asaltado en mitad de la A-1 por tres vehículos y no denunciaría los hechos ante la Guardia Civil".
Esperemos que en esta edición del concurso Melendi no tenga un choque en público como el que tuvo con Ruimán, concursante invidente que abandonó La Voz tras haber chocado con el cantante. Recordemos aquel incidente: El Ciego de La Voz
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