Jon Sistiaga empaña el gran comienzo de 'ETA, el final del silencio'





Movistar estrenó la pasada semana una obra mayúscula y muy recomendable: Zubiak, primer capítulo del serial 'ETA, el final del silencio'. Durante noventa minutos Sistiaga y Cortés-Cavanilas nos ofrecen un abrazo a la reconciliación al final del conflicto vasco al mostrarnos un encuentro entre un terrorista arrepentido y la viuda de un político asesinado.

Este brillante testamento audiovisual ayuda a sanar las heridas, nos proporciona un espacio reflexivo para el diálogo y nos muestra a dos personas que han decidido mirarse a los ojos para alegría de una comunidad que ha vuelto a dormir tranquila.

Lamentablemente, algunos de estos escasos testamentos no están surgiendo en RTVE o en EiTB porque los directivos de las radiotelevisiones públicas española y vasca creen que algunos partidos de la oposición harán electoralismo con este tipo de trabajos.

Podrían hacerlo algunos con el segundo capítulo del serial de 'ETA, el final del silencio', que queda lejos de Zubiak por el empeño de Jon Sistiaga a chupar cámara y poner sesgo a los testimonios de los extorsionados.


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